Como muchas especias, la cúrcuma (Curcuma longa) tiene una larga historia de uso en la
medicina tradicional. Esta especia llena de sabor se cultiva proviene de la raíz de una
planta originaria de la India con el mismo nombre, y es muy utilizada en la gastronomía del
sur de Asia. Además de darle al curry su color amarillo vibrante, existen múltiples
beneficios científicos de la cúrcuma de India.
El principal componente activo de la cúrcuma, y el que le da a la especia su característico
color amarillo, es la curcumina. De hecho, se puede atribuir a la curcumina la mayoría de
los posibles beneficios para la salud que posee.
Lo que tienes que saber de la cúrcuma
La curcumina es un antioxidante natural que tiene beneficios antiinflamatorios, así como
(posibles) beneficios relacionados con la desaceleración del proceso de envejecimiento y
la prevención de la enfermedad de Alzheimer y, potencialmente, la depresión.
Desafortunadamente, la cúrcuma (y la curcumina por sí sola) no se absorbe bien en el
torrente sanguíneo, y es poco probable que consumirla en curry una vez al mes brinde los
beneficios antiinflamatorios y antioxidantes deseados. Para alcanzar las cantidades de
cúrcuma y curcumina que se ha demostrado que ofrecen beneficios en estudios de
investigación, se debe recurrir a suplementos.
Aún así, es posible obtener más beneficios agregando pimienta negra cada vez que use
cúrcuma o tomando un suplemento de cúrcuma que incorpore pimienta negra. Esto se
debe a que existe un compuesto en la pimienta negra llamado piperina que en realidad
ayuda a que la cúrcuma sea más biodisponible. La “biodisponibilidad” se refiere a la
cantidad de una sustancia que el cuerpo absorbe o puede usar. Por ejemplo, un estudio en
animales encontró que 20 miligramos por kilogramo de peso corporal (mg/kg) de piperina
junto con 2 gramos por kilogramo de peso corporal (g/kg) de curcumina aumentaron la
biodisponibilidad en un 2.000%. Por supuesto, se necesita más investigación para
determinar si los resultados serían los mismos en humanos.
A continuación, describimos los muchos beneficios potenciales de la cúrcuma y la
curcumina.
Los 12 beneficios científicos de la cúrcuma de India
1. Tiene poder antiinflamatorio
Uno de los principales usos que se le da a la cúrcuma es para combatir la inflamación, y la
mayor parte de este beneficio es gracias a la curcumina. De hecho, en la dosis correcta, la
curcumina puede ser un tratamiento antiinflamatorio más eficaz que los medicamentos
comunes para combatir la inflamación, como ibuprofeno y la aspirina, según estudios.
Debido a que la inflamación crónica contribuye a muchas enfermedades crónicas, la
curcumina puede ayudar a tratar afecciones como la enfermedad inflamatoria intestinal, la
pancreatitis y la artritis.
2. Puede ayudar a proteger contra las enfermedades cardíacas
Estudios han mostrado que la curcumina puede mejorar la función endotelial o la salud de
la membrana delgada que cubre el interior del corazón y los vasos sanguíneos. Esta
membrana juega un papel clave en la regulación de la presión arterial. La función
endotelial inferior está asociada con el envejecimiento y un mayor riesgo de enfermedad
cardíaca. Por lo tanto, la curcumina puede ayudar a proteger contra la pérdida de función
relacionada con la edad y reducir la probabilidad de desarrollar una enfermedad cardíaca.
En un estudio, los investigadores compararon los efectos de un programa de ejercicio
aeróbico de ocho semanas y un suplemento de curcumina para mejorar la función
endotelial en mujeres posmenopáusicas. Tanto el grupo de ejercicio, como el de
curcumina, vieron mejoras iguales en la función endotelial, mientras que el grupo de
control no vio cambios.
Otro estudio encontró que la curcumina era igualmente efectiva para mejorar la función
endotelial en personas con diabetes tipo 2 (la enfermedad cardíaca es una comorbilidad
común del tipo 2) que el medicamento atorvastatina, un medicamento que se receta
comúnmente para reducir el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular.
Aún así, se necesita más investigación para determinar si la curcumina es una estrategia de
tratamiento a largo plazo segura y eficaz para las personas con enfermedades cardíacas.
3. Puede ayudar a prevenir (y posiblemente tratar) ciertos tipos de cáncer
Como la inflamación está relacionada con el crecimiento tumoral, los compuestos
antiinflamatorios, como la curcumina, pueden desempeñar un papel en el tratamiento y la
prevención de una variedad de tipos de cáncer, incluidos los cánceres colorrectales,
pancreático, de próstata, de mama y gástrico. También puede ayudar a retardar la
propagación de las células tumorales e incluso puede prevenir la formación de tumores.
Puede hacer esto de varias maneras, incluida la interrupción de la formación de células
cancerosas en varias etapas del ciclo celular, interfiriendo con las vías de señalización
celular e incluso provocando la muerte de esas células cancerosas. Aún no se ha
determinado si la curcumina puede ayudar a tratar el cáncer en humanos, pero la
investigación está en curso.
Algunas investigaciones también sugieren que la cúrcuma o la curcumina pueden ayudar
con ciertos síntomas del cáncer. Una revisión de 11 estudios sobre los efectos de la
cúrcuma en las enfermedades de la próstata (incluidos ocho estudios en pacientes con
cáncer de próstata), publicada online en agosto de 2021 como parte de la serie de libros
Advances in Experimental Medicine and Biology, sugiere que la suplementación con
cúrcuma o curcumina puede ofrecer ventajas. Si bien algunos estudios encontraron que la
curcumina o los suplementos de cúrcuma no tenían ningún efecto en los pacientes con
enfermedades de la próstata, algunos mostraron efectos beneficiosos sobre los niveles de
antígeno prostático específico (una proteína producida por la glándula prostática; los
niveles sanguíneos de esta proteína son generalmente más altos en hombres con cáncer
de próstata), frecuencia y urgencia de orinar y calidad de vida. Sin embargo, los
investigadores señalan que se necesitan más estudios para evaluar el verdadero impacto
de la curcumina en afecciones de la próstata como el cáncer.
4. Puede ayudar a aliviar los síntomas de la osteoartritis
Gracias a sus potentes propiedades antiinflamatorias, la curcumina puede ser una opción
de tratamiento segura y eficaz a largo plazo para las personas con osteoartritis (OA). Al
menos, esa fue la conclusión de los autores de una revisión reciente del uso clínico de la
curcumina para el tratamiento de la osteoartritis. La revisión se publicó por primera vez en
online en agosto de 2021 como parte de la serie de libros Advances in Experimental
Medicine and Biology.
En un estudio anterior, las personas con osteoartritis que tomaron 1.000 mg por día de
Meriva, experimentaron mejoras significativas en la rigidez y la función física después de
ocho meses, mientras que el grupo de control no vio mejoras. Meriva es un tratamiento
patentado compuesto por una mezcla de curcuminoides naturales (75% de curcumina;
15% de demetoxicurcumina y 10% de bisdemetoxicurcumina), fosfatidilcolina (una
sustancia química que se encuentra en los huevos, la soja y otros alimentos), y celulosa
microcristalina (una pulpa de madera refinada comúnmente utilizada por las industrias
farmacéutica y alimentaria).
Mientras tanto, un ensayo clínico reciente estudió los efectos potenciales de los
suplementos de curcumina en pacientes con osteoartritis de rodilla. El grupo que tomó 40
mg de nanocurcumina en una cápsula cada 12 horas, experimentó una disminución
significativa del dolor y la rigidez después de seis semanas en comparación con el grupo de
control. Los hallazgos se publicaron en 2020 en Current Rheumatology Reviews.
Y un estudio en ratones, publicado en la edición de junio de 2016 de Arthritis Research &
Therapy, encontró que 50 mg de curcumina oral por kg de peso corporal redujeron
significativamente la progresión de la OA, mientras que un tratamiento tópico con
curcumina proporcionó alivio del dolor. Estos beneficios específicos que se aplican a los
seres humanos aún no se han visto.
5. Puede ayudar a tratar o prevenir la diabetes
Según una revisión anterior de estudios, la curcumina puede ayudar a tratar y prevenir la
diabetes, así como trastornos asociados como la nefropatía diabética (también llamada
enfermedad renal diabética), que afecta a personas con diabetes tipo 1 y diabetes tipo 2.
Un inconveniente: muchos de los estudios se realizaron solo en animales, no en humanos.
Por ejemplo, un estudio encontró que administrar 80 mg de tetrahidrocurcumina (una de
las principales sustancias de la curcumina) por kg de peso corporal a ratas con diabetes
tipo 2, durante 45 días, condujo a una disminución significativa del azúcar en sangre, así
como a un aumento en insulina plasmática.
Un estudio de ratones obesos con diabetes tipo 2, publicado en la edición de julio de 2019
de Nutrition & Metabolism, reveló que los suplementos de curcumina ayudaron a reducir
los niveles de insulina en sangre después de 16 semanas.
Los autores de una revisión reciente señalan que la curcumina puede ser un buen
complemento del tratamiento de la diabetes para mejorar la resistencia a la insulina y el
control del azúcar en sangre, y reducir los lípidos en sangre (sustancias grasas que se
encuentran en la sangre).
Mientras tanto, la curcumina puede ayudar a prevenir la diabetes a través de sus
propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, y mejorar muchos de los factores que
contribuyen a la diabetes, incluida la resistencia a la insulina, el nivel alto de azúcar en la
sangre y la hiperlipidemia (un término médico para describir los niveles elevados de grasa
en la sangre). Un tipo de hiperlipidemia se caracteriza por niveles altos de LDL o colesterol
“malo”. Aún así, se necesitan más estudios en humanos para confirmarlo.
6. Puede ayudar a retrasar o revertir la enfermedad de Alzheimer
La cúrcuma incluso puede ayudar a proteger el cerebro contra enfermedades
degenerativas comunes como el Alzheimer. ¿Cómo? Al aumentar los niveles de factor
neurotrófico derivado del cerebro (BDNF), una proteína que se encuentra en el cerebro y
la médula espinal, y que desempeña un papel clave para mantener saludables las células
nerviosas (neuronas). Así como para regular la comunicación entre las células nerviosas,
que es fundamental para el aprendizaje y la memoria. Como los trastornos cerebrales
comunes como el Alzheimer están asociados con niveles más bajos de BDNF, la cúrcuma
(curcumina en particular) puede ayudar a retrasar o revertir la degeneración cerebral.
Dicho esto, gran parte de la investigación se ha realizado en ratas. Los investigadores
señalan que se necesita más investigación para confirmar la eficacia de la cúrcuma en la
prevención y el tratamiento de enfermedades cerebrales comunes.
7. Puede desempeñar un papel importante en el tratamiento de la depresión
Al igual que el Alzheimer, la depresión se asocia con niveles más bajos de BDNF. Gracias a
la capacidad de la cúrcuma para aumentar los niveles de BDNF, la especia se muestra
prometedora como un antidepresivo eficaz. De hecho, un estudio encontró que las ratas
inyectadas con 50, 100 o 200 mg/kg de curcumina durante 10 días tuvieron un aumento
dependiente de la dosis en el BDNF, y la dosis más alta de 200 mg/kg mostró mayores
efectos antidepresivos.
Mientras tanto, en un estudio en humanos que se publicó en Phytotherapy Research, los
investigadores asignaron al azar a 60 pacientes con trastorno depresivo mayor a uno de
tres grupos: un grupo recibió 20 mg diarios de fluoxetina (Por ejemplo: Prozac), otra
recibió 1.000 mg de curcumina y un tercero recibió una combinación de los dos. Al final de
las seis semanas, los tres grupos vieron mejoras comparables, lo que llevó a los
investigadores a sugerir que la curcumina puede ser un tratamiento seguro y eficaz para el
trastorno depresivo mayor.
Aún así, los científicos no comprenden completamente el papel de la cúrcuma y la
curcumina en el tratamiento de la depresión, y se necesita más investigación en humanos
para confirmar que es un tratamiento seguro y efectivo. Por lo que debe consultar a su
médico antes de comenzar o cambiar cualquier medicamento que esté tomando.
8. Puede ayudar en el tratamiento de la artritis reumatoide
La curcumina se muestra prometedora como tratamiento para la artritis reumatoide (AR),
un trastorno inflamatorio crónico que comúnmente afecta las articulaciones, pero que
puede extenderse a otras áreas: como los ojos, los pulmones, la piel, el corazón y los vasos
sanguíneos. Es una inflamación dolorosa de las articulaciones que puede hacer que los
huesos se erosionen con el tiempo y, en última instancia, provocar deformidades y
discapacidades físicas.
En un estudio, las personas con AR recibieron 500 mg de curcumina, 50 mg de diclofenaco
sódico (un medicamento antiinflamatorio no esteroideo recetado) o los dos en
combinación. Después de ocho semanas, el grupo de sólo curcumina experimentó mejoras
significativas en la sensibilidad e hinchazón de las articulaciones, en comparación con los
otros dos grupos. Los investigadores señalan que el tratamiento con curcumina también
fue seguro, y no provocó eventos dañinos.
9. Puede mejorar la salud de la piel
Gracias a sus propiedades antiinflamatorias, antimicrobianas y antioxidantes, la cúrcuma
puede ser un tratamiento eficaz para diversas afecciones de la piel, como el acné, el
eccema (dermatitis atópica), el fotoenvejecimiento y la psoriasis. Sin embargo, se carece
de una investigación sólida.
Una revisión publicada en la edición de enero de 2018 de Open Access Macedonian
Journal of Medical Sciences, sugiere que la curcumina oral en particular puede ser una
opción de tratamiento eficaz y segura para la psoriasis (una enfermedad inflamatoria
crónica de la piel), pero se necesitan más estudios antes de que los médicos hagan
recomendaciones.
Según los autores de otra revisión, los tratamientos tópicos con curcumina pueden ser
útiles para tratar los trastornos de la piel, especialmente porque investigaciones anteriores
sugieren que la curcumina es relativamente segura incluso en dosis altas. Pero el color
amarillo anaranjado brillante de la curcumina, la escasa solubilidad y la escasa estabilidad
a un pH alto lo convierten en un tratamiento tópico para la piel poco atractivo.
Y debido a su baja biodisponibilidad, es probable que se tenga que usar curcumina para
complementar, no reemplazar, otros tratamientos para la piel, según los autores de un
artículo publicado en septiembre de 2019 en Nutrients.
10. Protege el cuerpo de los radicales libres
Los antioxidantes ayudan a proteger el cuerpo contra el daño causado por los radicales
libres, una clase de átomos altamente reactivos que se generan en nuestro cuerpo y se
encuentran en contaminantes ambientales como el humo del cigarrillo y los químicos
industriales. Demasiada exposición a los radicales libres puede afectar las grasas,
proteínas, e incluso el ADN en su cuerpo, lo que puede conducir a una serie de
enfermedades y afecciones de salud comunes, como cáncer, artritis, enfermedades
cardíacas y Alzheimer. Por lo tanto, las especias ricas en antioxidantes, como la cúrcuma,
pueden desempeñar un papel importante en la protección contra el daño de los radicales
libres.
La curcumina, en particular, es capaz de eliminar diferentes tipos de radicales libres,
controlar las enzimas que neutralizan los radicales libres y evitar que ciertas enzimas creen
tipos específicos de radicales libres, según una revisión de la edición de octubre de 2017
de Foods.
11. Puede funcionar como un suplemento antienvejecimiento
Actualmente, no hay evidencia de que la cúrcuma o la curcumina influyan directamente en
la longevidad, pero gracias a su capacidad para combatir la inflamación, puede proteger el
cuerpo contra los radicales libres y potencialmente retrasar la degeneración cerebral y
otras enfermedades relacionadas con la edad. La cúrcuma y la curcumina pueden ser
suplementos antienvejecimiento eficaces, según investigaciones anteriores.
Los estudios también sugieren que la cúrcuma y la curcumina son en su mayoría seguras,
aunque se han informado algunos efectos secundarios negativos (diarrea, dolor de cabeza,
erupción cutánea) en dosis que varían de 500 a 12.000 mg.
12. Puede prevenir la degeneración ocular
El glaucoma, un grupo de afecciones oculares, es una de las principales causas de ceguera
en personas mayores de 60 años. Y, desafortunadamente, una vez que su visión
desaparece, no se puede restaurar.
Pero una investigación publicada en julio de 2018, en Scientific Reports, muestra que los
tratamientos tópicos con curcumina pueden ayudar a proteger los ojos contra la
degeneración. Los investigadores aplicaron una solución de gotas oftálmicas de curcumina
patentada a ratas dos veces al día, durante tres semanas. Al final del estudio, las ratas no
tratadas experimentaron una reducción del 23% en las células de la retina en comparación
con el grupo de tratamiento, lo que sugiere que el tratamiento con curcumina previno la
pérdida. Los hallazgos del estudio suenan impresionantes, pero se necesitan más estudios
para determinar si la curcumina es efectiva para prevenir la degeneración ocular en
humanos.